Con cierto, pero entendido retraso, en la mañana del pasado sábado se procedió por las principales autoridades locales, la inauguración de diversas calles del populoso barrio de Juan de la Cierva. Incluidas en el glorioso plan nacional, para la estimulación económica.
Desde horas antes, previas al acontecimiento, se fueron arremolinando vecinos y curiosos, tomando posiciones para disfrutar y no perder ripio de tan magno acto.
Cuando la principal autoridad civil, hizo acto de presencia, una multitud expectante abarrotaba la Plaza de las Provincias, y aledaños, (se calcula que entre 50.ooo mil los asistentes) inhalando el agradable olor a “paella” y disfrutando de la actuación de malabaristas, y música tamborilera. Juegos infantiles para los más pequeños, que gozosos disfrutaron de una mañana y tarde que amenazaba lluvia.
Procediendo como corresponde. La comitiva más representativa del gobierno municipal, realizaron un sencillo y corto, pero emotivo recorrido por las diversas calles (absteniéndose de pasar por la avenida de España, arteria principal de esta barriada, al estar esta nuevamente en obras) entre los vítores y aplausos de los vecinos que desde los balcones emocionados presenciaban el cortejo.. Una llamarada de flash, inmortalizaron el momento, la prensa grafica, los medios radiofónicos y alguna televisión difundieron ampliamente el acto.
Mientras esto sucedía, en otros puntos de la Capital del Sur, no todo era diversión y festejos.
A escasos metros del lugar, en la Avenida España, el repicar de un martillo hidráulico, de esos de picar el asfalto, y una excavadora, molestaba a los sufridos vecinos y sorprendía a quienes no daban crédito al ver unas nuevas obras. Y es que; con esto del Glorioso Plan ya no se respetan ni los días de asueto y descanso, como apuntaba un vecino, indignado por las adversas circunstancias. Ver foto nº 1
Bastante más alejado, pero dentro de la urbe de la Capital del Sur. En la calle Cuestas Altas, un joven sufre un esguince, al intentar saltar, sobre las troceadas baldosas en la acera y evitar pisar el barro. Ver foto nº2
Cerca de la calle de las Cuestas, en la incomparable plaza del Ayuntamiento, un futuro inversor catalán, mal pisa una de las cuarteadas baldosas salpicándole las perneras y ensuciando sus lustrosos zapatos. Ello le obliga a mascullar una supuesta maldición. Ver foto nº 3
Uno de nuestros mayores, vecino de la calle General Castaños, tropezó con una de esas baldosas, en la calle Madrid esquina con General Castaños, haciéndole caer al suelo. En ese lugar en concreto, y que sepamos es la segunda vez que se produce ese lamentable suceso. Ver foto nº4
Vecinos de las calles Perate, Sierra, Móstoles, redescubren los solares, con sus vistosas vallas y comentan el golpe sufrido por un automóvil, aparcado junto a ellas. Y la posibilidad de sufrir algún peatón circunstancias parecidas. Admiran como un milagro económico caído del cielo, los escombros y el inodoro depositados en el solar y acera de la calle Móstoles. Es un signo evidente de la recuperación económica, fruto de la lotería de navidad. Resistiremos y seguiremos soportando las dificultades de acceder a nuestros domicilios, como ciudadanos normales, entendiendo que esa acera es para aparcar vehículos. Apreciaremos esos solares como símbolo de progreso y distinción. Ver foto nº 5
Un despistado automovilista vecino de San Isidro, discute con el conductor del autobús urbano, indicándole que él tiene prioridad al acceder al garaje y que lo de la obligatoriedad que indica la señal de tráfico, no esta nada claro, AL NO FIGURAR EN LA LEY DE TRAFICO TAL SEÑAL. Ver foto nº 6
Y para terminar esta imaginaria crónica festivo -celebratión. Advertirles que no todo ha sucedido tal cual expreso, las fotos, un tropezón con caída incluida, y poco más. Es aquello de: “Podría ser verdad y no haber sucedido”. Por ello les invito ha que visiten el contenedor ubicado al comienzo de la calle Oeste, esquina con la de Valdemoro (barrio de San Isidro) e indaguen sobre su contenido, de haber azulejos y elementos derivados de las antaño, reformas domesticas. Seria una muy buena señal. Una buenísima señal. Acérquense y disfrútenlo.
Disculpen por la extensión pero hay actos tan excelentes que no pueden ser resumidos como, servidor de ustedes quisiera. Lo de las farolas para otra ocasión.
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