No han hecho los deberes.







Podría dar por concluida la batalla mantenida con miembros del “poder local” representado en la concejalía de obras y servicios o urbanismo y obviamente en quien regenta el poder absoluto en Getafe, el alcalde. Y expreso concluida, dado que en este momento en el que redacto este alegato, debería dar por bien realizadas las obras de reparación en el inicio del paseo Felipe Calleja. Pero permítanme usar una frase muy al uso, “va ha ser que no”. La razón no es otra, que la falta de rigor y con ello de seriedad y respeto al ciudadano, respecto al adecentamiento y recuperación de la acera y su conjunto. Pero hagamos un poco de historia para que usted paciente lector sepa el “porque” dé mi pública denuncia.


Hace casi dos años que se iniciaron las obras de un aparcamiento subterráneo,(actualmente paralizado) en el paseo Felipe Calleja, para así cumplir con el “glorioso plan municipal” de aparcamientos públicos. Las obras comenzaron su andadura con el necesario eco publicitario. Es decir; la colocación de unos enormes carteles- vallas metálicas, promocionando y dando publicidad de ello. Y CON ELLO EMPEZO EL DESTROZO. De entrada el mencionado artilugio metálico lo colocaron en plena acera, eso si, con vista hacia la casa de Extremadura con el fin de un mejor lucimiento.. Tal estruendo estático y estético, nos obligaba a esquivar los pilares del cartel, o pasar por debajo del mismo. El esperpento metálico debió de sonrojar a los propios, y procedieron a su retirada instalándolo de una manera menos comprometida para quienes pasamos por esa acera de forma habitual. Pero dejaron de forma bien visible la huella del esperpento en el pavimento. Conforme avanzaban las obras el espacio útil de acceso peatonal se fue restringiendo, hasta crearse un riesgo el transitar por el. De forma obscena, y mostrando una servidumbre increíble, se fue acotando y eliminado el uso de una franja de acera en beneficio de la construcción, hasta el punto de verse obligado el ayuntamiento ha realizar una indecorosa y sufrida rampa más propia de chapuceros inclementes, que de profesionales en esa materia. La situación se comprometía más aún, con la incívica manera de aparcar encima de la acera por la permisividad de la policía local. La cosa se fue agravando en su deterioro, con la realización de una zanja longitudinal en la calzada y pegada al bordillo de la acera, con un único fin, dar servicio eléctrico a una caseta de información y venta de los aparcamientos, ubicada en un espacio público, como es el jardín o parquecito cercano. Ese fue el único fin de tan alto destrozo. Con el transito propio de los camiones hormigonera, la calzada se fue convirtiendo en un lugar de alto riesgo para los automovilistas, parcheando esa parte, sin solucionar el problema que con el tiempo y el paso de autobuses genero en un llamativo socavón, y una indescriptible suciedad,, podredumbre urbana, y peligrosidad.

Han sido numerosas las denuncias registradas en el ayuntamiento, aportando fotos, y manifestando mi repulsa por el servilismo prestado a la constructora, exigiendo responsabilidades por el innecesario deterioro, y pidiendo la reparación de las baldosas eliminadas por la colocación del cartel. No todo cayó en saco roto y se colocaron unos bolardos con el fin de impedir aparcar en la cera, pero el mal ya estaba hecho.

Lo más indignante y reprochable a los gobernantes fue y es, el deprecio manifestado a personas con discapacidad. No han servido la aportación de fotos denunciando semejante situación por la carencia de adecuar ese espacio a personas con movilidad reducida. La inexistencia de bordillos rebajados y una rampa inapropiada no han despertado a la responsable de esa concejalía, ni tan siquiera al alcalde, ese acto de SENSIBILIDAD ciudadana que se corresponde con esa situación tantas veces denunciada. Después de tanto encono por mi parte, solo he recibido la “bofetada” del desprecio, del poder político, insensibles y ajenos. Ellos que arrogantes y con escénica grandiosidad han donado más de dos millones y medio de euros a las casas regionales. Que alardearon de eliminar las barreras arquitectónicas para dar más garantías y efectividad a la movilidad, hacer de Getafe una ciudad más asequible a quienes tienen reducida su capacidad de autonomía y son dependientes. Pues bien este es el resultado. Irresponsabilidad, e irrespetuosos, con quienes les mantienen asegurado su sueldo.

Alto y claro: “Alcalde; gobierno municipal, NO han hecho bien los deberes” y eran bien sencillos.

Ahora años después se repara ese lugar que permitieron y animaron a su deterioro, por una flagrante ineptitud y falta organizativa. Y ante esto cabe preguntarse: ¿cuanto dinero nos ha costado a los ciudadadanos, el deterioro organizado y la ahora reparación de ello?. Seguiré en la brega hasta ver repuestas las baldosas de la acera y por supuesto el necesario y obligado rebaje de bordillos.

Querido y paciente lector, no solo mostré mis inquietudes a los gobernantes locales. Ni mis manifestaciones de repulsa se limitaron a los pertinentes escritos. Donde se me ha permitido he denunciado ese despropósito. Mis denuncias han tenido otros destinatarios, el juez decano de Getafe, el vicepresidente del gobierno de España, Don Manuel Chaves, la presidenta de la comunidad, y más de un regidor local, entre otros.


Ciertamente Getafe es poseedora de infinidad de valores que sus propios ciudadanos desconocen .Entre otros, los miembros de los grupos políticos del gobierno local, pero de manera especial los “cargos de confianza”, oficialmente llamados cargos de libre designación. Figura administrativa esta, con poco más de tres decenios de antigüedad y que goza de excelente salud laboral.




PREGUNTA: ALGUIEN SABE, DONDE ESTAN LAS FAROLAS ISABELINAS RETIRADAS DE LA CALLE TOLEDO.


Fanegas de la Alhóndiga.

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