Comentario de ti para mi..

A : Mariano García
Confieso estar embelesado con la lectura del libro “Getafe Capital del Sur”. Su autor J.Manuel Alcalá, para quien no lo conozca, es editor, periodista y obviamente escritor, dedicado al ámbito local generalmente. Y generalmente con la acidez justa, para no empalagar ni producir ardores estomacales. Ha pasado tiempo desde los comienzos de Alcalá y su compañera…de fatigas, (por cierto que hace bastante que no coincidimos, por la sin par calle Madrid.) en aquellos primeros inicios si no recuerdo mal, en la calle Torrejón de Velasco, en el barrio de San Isidro. La lectura del libro, me abre de par en par, esa entornada ventana, que me permite, acceder a esa casa común, que es la memoria y que alberga los recuerdos, para así reencontrarme con pasajes de este pueblo mío… mío... más que de nadie y de lo cual presumo, y asi recuperar la imagen juvenil, de aquellos que ahora pretenden emular a mecenas, controlan a editores, y a modo de blasón comercial, exhiben un trébol.
Quienes nos hemos pateao la calle Madrid y sin ir al frente del pelotón reivindicativo, hacíamos número en aquellas manifestaciones, evocamos el origen de muchos, por no decir de todos.. Son personajes reales, y con efervescente actualidad. Y como toda persona disponen de un pasado y un presente.. lo de futuro lo obvio…Todos tienen ese necesario pedigrí que les encuadra, como portentosos hacedores de las recalificaciones y el estraperlo rustico o urbanizable. Aunque puedan parecer sacados de una novela, tiene vida propia. Los “Pirri”; y company, si bien, deberíamos de denominar eso si, cariñosamente,”pirriaca” como le conocíamos. Por entonces no habían legalizado al PCE. Treinta años después…queda lo que queda del PCE, y gracias. Por aquel entonces; el olor a compañerismo era la esencia del todo. Y todos… compañeros del metal… de SIEMENS, KELVINATOR, CASA, METALINAS, JOHN DEERE y hasta una mediana empresa de nombre, MANUFACTURADOS GARCIA, dedicada a la fabricación de señales de trafico.
De entre los personajes aludidos en el libro. Hay uno que me suscita un mayor interés por la suerte de que parece disponer. Pues no me dirán ustedes que no es suerte, el hecho de que anulen o más bien eliminen, plazas de aparcamiento público destinado a la carga y descarga de mercancías, al inicio de la calle Sierra, con el único objetivo de favorecer el paso a un aparcamiento privado, que tiene su acceso enfrente. Y para presumir de vado, colocan unas placas sin homologar por el ayuntamiento. A eso se le llama suerte, o tener mano….¿Izquierda derrochona?. Por aquello de a pelo y a pluma. Tan cierto lo anterior como que el edificio o sus propietarios podrían estar tocados por la fortuna que se atribuye a la planta herbácea de cuatro hojas de nombre Trébol. Puestos en contacto con los servicios municipales competentes, por causas de un incomprensible incidente por la ocupación momentánea del susodicho vado. Apelan desde los servicios municipales al entendimiento y la normal convivencia, para respetar el mencionado acceso. Evidente; para lo anterior, se aplican ordenanzas y leyes y se emiten licencias homologadas por el ayuntamiento que se deben de exponer para general conocimiento.

Sin duda alguna la cacicracia, que denunciaba Silverio Lanza, hace dos siglos, sigue vigente, eso si más actualizada. Por cierto estará enterado el concejal de cultura y urbanismo que existe calle dedicada a Juan Bautista Amorós y el estado que presentan sus fachadas.

Con lo mejor de mi…Fanegas de la Alhóndiga.

A quienes sufren la inquina del caudillismo local

No hay comentarios:

Publicar un comentario